Propiedad Industrial

La Propiedad Industrial se define como el conjunto de derechos exclusivos que protegen, tanto la actividad innovadora materializada en nuevos productos, nuevos procedimientos o nuevos diseños, como la actividad mercantil, mediante la identificación en exclusiva de productos y servicios ofrecidos en el mercado.

Estos derechos exclusivos son bienes inmateriales que forman parte de los “activos intangibles” del empresario, los cuales, con una adecuada estrategia de mercado y publicidad, logran convertirse en un factor de internacionalización, reputación, prestigio y ventaja competitiva. Pueden llegar a convertirse en los activos de mayor valor de la empresa. Son bienes susceptibles de ser explotados económicamente a través de licencias de uso, traspaso, venta, entre otras figuras.

La Propiedad Industrial en España se divide en tres grandes ramas:

  • Los signos distintivos, conformados por las marcas y los nombres comerciales
  • Las Invenciones, integradas por las patentes de invención, los modelos de utilidad y las Topografías de Productos Semiconductores
  • Los diseños industriales