El Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) y la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) iniciaron hoy el “Taller de formación de facilitadores en marcas colectivas”, actividad que permitirá promover el uso de las marcas colectivas en las comunidades indígenas y los productores de los Valles de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem).

Con este taller, ambas instituciones fortalecerán las capacidades de sus especialistas quienes se convertirán en facilitadores que orienten, difundan y promuevan el uso de las marcas colectivas como importante herramienta de desarrollo ya que constituyen la opción más adecuada para sacar adelante a los emprendedores rurales y ofrecen muchas ventajas a los productores, fabricantes y comerciantes de productos y servicios a través de la asociatividad.

Además, estos facilitadores identificarán productos potenciales, como café o cacao así como a grupos de productores que podrían aprovechar las marcas colectivas para que sus productos tengan más valor y sean apreciados y preferidos por los consumidores.

La importante actividad se da en el marco de un convenio suscrito entre ambas instituciones el pasado 11 de diciembre de 2014, así se desarrollará un trabajo conjunto y coordinado que busca que las organizaciones de productores tengan éxito en el mercado y que puedan constituir ofertas sostenibles en favor de sus familias y la comunidad en la que realizan sus actividades económicas.

Como se sabe, las marcas colectivas son herramientas de la propiedad intelectual que se emplean para distinguir los productos o servicios que pertenecen a un colectivo de personas o empresas, legalmente establecidas.

Una de las principales ventajas de la marca colectiva es que el grupo que la posee puede competir en el mercado de manera conjunta y se obliga a establecer una estrategia común. Asimismo, obliga a unificar calidad, es promocionada por varias personas lo que reduce los costos, y contribuye a promocionar el atractivo turístico de la zona donde se ubican los productores.