La Superintendencia de Industria y Comercio, mediante Resolución Nº 42.603 de 2016 otorgó patente de invención a la Universidad del Valle, para el proceso de producción de un compuesto obtenido mediante nanotecnología, que comprende tubos de carbono multicapa y dióxido de titanio para el tratamiento de cáncer.
En este caso específico, la nanotecnología corresponde a la manipulación de la materia en escala de medida de nanómetros (nm), es decir de(1 nm =10-9metros).El compuesto desarrollado tiene forma cilíndrica, por lo que comúnmente son llamados nanotubos, los cuales han mostrado un gran potencial en el campo biomédico, particularmente en las áreas de ingeniería de tejidos, terapia foto-térmica, terapia foto-acústica y en el desarrollo de sistemas de liberación de compuestos con actividad farmacéutica. Los sistemas de liberación permiten incrementar la actividad farmacológica de los ingredientes activos y disminuir los efectos colaterales asociados a los mismos, debido a que su forma facilita la penetración de las membranas y su acumulación en células tumorales.
En el estado de la técnica y a pesar de los avances en el desarrollo de este tipo de compuestos, aún se observa una imperiosa necesidad en desarrollar novedosos y eficientes compuestos mediante la nanotecnología que permitan eliminar las células tumorales en el cuerpo humano sin los efectos secundarios de la quimioterapia y la radioterapia convencional sobre las células no tumorales.
Por esta razón, investigadores de la Universidad del Valle desarrollaron un procedimiento para la obtención de nanotubos de carbono multicapa funcionalizados, donde la funcionalización corresponde a la introducción de átomos o grupos químicos en la superficie.
Los ensayos in vitro desarrollados por la Universidad del Valle mostraron que la invención tiene efecto citotóxico en células neoplásicas de cuello uterino humano y que esta actividad se mejora cuando se combina con radiación UV-A, mientras que en células normales no se observa este efecto citotóxico.
De igual manera, los inventores realizaron ensayos para evaluar la genotoxicidad, que es la capacidad para causar daño al material genético, y la mutagenicidad, capacidad para generar mutaciones genéticas, encontrando que los nanotubos desarrollados no generan estos efectos secundarios.
En ese sentido, la invención patentada constituye un avance en el campo técnico, que si continuara con los demás ensayos requeridos para la autorización por parte de la autoridad sanitaria podría constituirse en una alternativa para el tratamiento del cáncer.
Finalmente, un informe de la Dirección de Nuevas Creaciones de la Superintendencia de Industria y Comercio revela que las solicitudes nacionales en el primer semestre del año crecieron 95%, con 248 solicitudes, comparado con el mismo periodo de 2015 cuando se presentaron 127. En el caso de las universidades, presentaron un aumento de 50% pasando de 38 a 57 solicitudes en el mismo periodo.

Por último, la Universidad del Valle durante el periodo de 2010 a 2015 ha presentado ante la Superintendencia de Industria y Comercio 18 solicitudes de patentes de invención en diferentes sectores tecnológicos, de las cuales doce de ellas ya han sido otorgadas.

¿Qué es la Nanotecnología?

La palabra “nanotecnología” es usada extensivamente para definir las ciencias y técnicas que se aplican al nivel de nanoescala, esto es unas medidas extremadamente pequeñas “nanos” que permiten trabajar y manipular las estructuras moleculares y sus átomos. En síntesis, permite la posibilidad de fabricar materiales y máquinas a partir del reordenamiento de átomos y moléculas.

(https://www.euroresidentes.com/futuro/nanotecnologia/nanotecnologia_que_es.htm)
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